#Represión: El Parlamento australiano aprobó una enmienda a la ley que establece sentencias mínimas para una serie de delitos nuevos, incluido el de hacer el saludo romano. La modificación de la ley prevé, entre otras cosas, una pena mínima de un año de prisión por el saludo NS en público. Contó con el apoyo de la mayoría gubernamental de centroizquierda y de la oposición conservadora.
El primer ministro Anthony Albanese defendió su apoyo a la enmienda (aunque su partido en realidad se opone a este tipo de medidas represivas contra otras ideologías) afirmando: “Queremos que las personas involucradas en actividades antisemitas sean capturadas, acusadas y encarceladas (...) Ésa es mi prioridad”.
Realmente, el gobierno Australiano (anti-australiano) tiene miedo de la popularidad y dinamismo que están teniendo las agrupaciones NS y, no duda en reprimir a sus integrantes, hostigando el buen desarrollo de sus actividades.
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