Todo por diseño, no “previsto”, sino planeado durante décadas.
Crean el problema esperando la reacción del público para ofrecer la solución. A esto se le llama la Dialéctica Hegeliana.
La dialéctica hegeliana: problema, reacción y solución.
La técnica es tan antigua como la política misma. Se trata de la dialéctica hegeliana, que consiste en generar un cambio en un proceso de tres pasos: tesis, antítesis y síntesis.
El primer paso (tesis) consiste en crear un problema. El segundo paso (antítesis) consiste en generar oposición al problema (miedo, pánico e histeria). El tercer paso (síntesis) consiste en ofrecer la solución al problema creado en el primer paso: un cambio que habría sido imposible de imponer a la gente sin el condicionamiento psicológico adecuado logrado en las etapas uno y dos.