Nimrod afirma:
“nosotros vamos en pos de lo inmutable, de lo eterno e imperecedero. ¿Sobre qué entonces habrá que sostenerse? Respuesta: sobre la expresión de aquello que es Eterno, sobre la expresión del Espíritu. Entonces, una de las tareas urgentes es diferenciar en nuestro mundo interno, qué es perecedero y qué es eterno, sosteniéndose únicamente sobre aquellos entes que representan a lo eterno, y eso se logrará únicamente manteniendo el ALERTA con VOLUNTAD”.
Aquí se me viene a la memoria la famosa expresión del maestro Nietzsche: “La Voluntad de Poder” (‘The Will of Power’). ¿A qué poder se refería? ¿Acaso al poder económico, político o cualquier otra asociación cultural de la palabra Poder? ¿Allí hay una clave, pues se referirá al Poder del Espíritu como expresión, como acto de la voluntad de SER de nuestro Espíritu, Espíritu sobre materia, Imperio sobre Caos Social? La VOLUNTAD es la expresión de lo ETERNO, así como el VALOR y la VERDAD. Todos estos valores tienen su origen en lo eterno e imperecedero, de allí que las culturas influenciadas o dirigidas por el Pacto de Sangre tuvieran estos valores como sus pilares y directrices estratégicas.
¿De dónde deviene lo Eterno en nuestro ser? Respuesta: pues de la imagen del Yo Infinito, y como infinito no apegado ni condicionado a ninguna expresión cultural, libre de condicionamientos de la cultura, condicionamientos de nuestra personalidad, de lo que pensamos acerca de nosotros, del resto del cosmos que nos circunda o de lo que alcanzamos a ver, y de los conceptos preestablecidos de lo que incluso no alcanzamos a ver, es decir, de lo que creemos que el mundo es más allá de nuestras fronteras sensoriales, y que sin embargo, hemos construido como cultura aproximaciones ontológicas acerca de lo que no sabemos. Ese es el trabajo de la ciencia pura y de sus sacerdotes, científicos, físicos cuánticos, biólogos, microbiólogos, etc.; todos especulando acerca del mundo más allá de nuestras esferas sensoriales, construyendo teo-rías y fórmulas que no hacen más que mantener en nuestras mentes la ilusa percepción de que podemos conocer todo. Falsa presunción de la ciencia actual.
El infinito se abre como un abismo debajo de nuestros pies, y sobre ÉL no podemos pisar. Habrá que dejar la barca del ESQUEMA DE SÍ MISMO-ALMA para tomar el OVNI del SELBST, la esfera Ehre de voluntad y acción puras, noológicas, el Espíritu. Solo un vehículo tal podrá sobrevivir a la disolución del alma en el abismo del infinito actual de nuestro propio Espíritu. Aquello es eterno, inmutable, imperecedero, inmortal más allá de los Pralayas Cósmicos, del fin de los procesos evolutivos del Cosmos y todo lo que contiene.
La solución final está entonces en EHRE y su posibilidad de acceder al kairos de la Iniciación; eso solo se dará en la medida de haber comprendido hasta en los procesos más profundos de nuestra mente que estamos sostenidos sobre un esquema ilusorio, y que lo real está más allá de las fronteras del alma, en un punto gnóstico que la Sabiduría Hiperbórea llama SELBST.