Un día 3 de abril como hoy, pero de 1978, varios individuos intentan asesinar a machetazos en Argel a Antonio Cubillo, fundador en 1964 del Movimiento de Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario.
Cubillo fue el líder de un movimiento independentista en las islas, de carácter africanista, que entendía las islas Canarias como sometidas de forma antinatural y colonialista a España. El movimiento contaba a su vez con un relativamente activo brazo armado autodenominado las Fuerzas Armadas Guanches.
En 1990 la justicia española reconocería la implicación de las fuerzas policiales mandadas por el ministro Rodolfo Martín Villa, como se recoge en sentencia oficial, en la trama de los hechos. Al parecer, un infiltrado policial habría contratado dos mercenarios encargados del chapucero atentado. Incluso, los servicios secretos alemanes se habrían visto salpicados en el asunto a través de la presencia en el entorno independentista canario de uno de sus agentes. Cubillo sobreviviría al ataque pero sufriría secuelas de por vida.
En 2005, otra sentencia judicial ratificaría la implicación de ciertos sectores de las instituciones del momento en los hechos, obligando al estado español a indemnizar a Cubillo por el daño irreparable causado.
Un ejemplo más de esas cloacas cerradas en falso desde las que se fabricó la popularmente conocida como Transición española.