Los sucesos de Jerez.
La noche del 8 al 9 de enero de 1892, cientos de jornaleros irrumpen en la localidad de Jerez de la Frontera gritando “Viva la Anarquía. Muera la burguesía.”. Con ello pretenden denunciar las miserables condiciones de trabajo en el campo andaluz. La multitud toma cuartel y comisaria y marcha sin oposición a la prisión para liberar a los compañeros. Durante más de dos horas, hasta la llegada de las tropas, la ciudad está en manos de los jornaleros anarquistas.
Tras la represión que continuó al episodio se produjeron decenas de detenciones. En un juicio de guerra los anarquistas Jesús Fernández Lamela, Antonio Zarzuela, Manuel Fernández Reina Busiqui, y Manuel Silva El Lebrijano serán acusados de liderar la insurrección y condenados a muerte, siendo ejecutados en apenas días, concretamente el 10 de febrero. Una oleada de ataques a entidades y nombres importantes de la autoridad se desató en Andalucía y Barcelona, principalmente, como respuesta.